TEXTOPATA
El Ratón Que Quería Ser
Había una vez un par de ratoncitos que vivían en una casa de
gente muy pobre. Un día el niño de la familia quien andaba en muletas pues le
faltaba una pierna trajo a la casa un queso que le había obsequiado una
viejecita quien recién se había mudado en frente. El niño había ayudado a esta
extraña dama quien vestía totalmente de negro con un velo que cubría su rostro.
Contenta toda la familia del niño se disponía a comer ese rico queso pero antes
tenían que esperar al padre quien se prostituía en el puerto del pueblo con
cuanto pescador hubiese en dicho lugar. La madre siempre permanecía en cama
puesto que tenía medio cuerpo paralizado por una enfermedad que por su pobreza
no pudo tratar. Realmente era una familia de mierda cuya suerte estaba no solo
echada sino que también enterrada. Pero esa noche tenia que ser especial porque
todos iban a degustar del rico queso con los bolillos secos de pan que el padre
siempre compra al llegar a casa. Los ratoncitos idearon un plan para robar el queso
así que lo pusieron en marcha aprovecharon el descuido de la familia y estos
mordieron el queso y lo arrastraron hasta su agujero. Pero la madre se da
cuenta y pega un grito. En eso llega el padre y el niño le dice que los ratones
están robándose la comida, el padre reacciona y toma la escoba. Los ratoncitos
se dan cuenta y aceleran la carrera pero el ratón que estaba adelante tomo
fuerzas de flaqueza y corrió mas con el queso encima dejando al segundo ratón
atrás. El primer ratón logra entrar al agujero y con el mismo queso cierra la
entrada y oye como la escoba retumba en el piso de madera una y otra vez con su
amigo por debajo. El desafortunado ratón es aplastado por el enfurecido padre
hasta que este revienta soltando las entrañas que tenia en su cuerpecito de
roedor. Pobre de la familia una vez más a comer bolillos de pan seco con agua
de lluvia. El ratón que había sobrevivido no aguanto el hambre y sin pena se
abalanzo sobre el queso pero algo extraño paso. El queso hablo y le dijo que no
se lo comiera y en vez le iba a conceder tres deseos. El ratón aprovecho la
situación y le dijo que lo convirtiera en gato. Así fue entonces en felino fue
convertido, con el afán de sentir la superioridad ante un roedor. Pero luego
quiso ser un perro porque sabía que los gatos de ese barrio eran desechos por
los canes callejeros. En perro fue convertido. El niño de la casa se encariño
con el nuevo animal y sus padres no querían aceptarlo porque no había
suficiente comida ni espacio en la casa. El perro fue dejado en la fría calle a
lo que este le pidió su ultimo deseo al queso y le pidió que lo convirtiera en
hombre pero se exalto y detuvo la petición y la cambio por el deseo de no ser
hombre porque no importase cual fuese la criatura que viviera en la tierra una
siempre dependía de la otra o era sometida y abusada por aquellos que eran
superiores. Así que pidió ser Dios y así fue entonces que fue convertido en
queso. La extraña viejecita que pasaba por ahí tomo ambos quesos y los puso en
la puerta de la casa del niño pobre, toco tres veces y se retiro. Esa noche de
mayo de 2012 la familia comió queso y al día siguiente murió junto a otras
miles de personas. Al promedia la tarde un terremoto de ocho grados y medio
azotó la cuidad de Lima. Los arenales volvieron a ser arenales y los cerros
volvieron a ser cerros. El mar del Callao se salió limpiando el sitio de tanta
mugre que por tanto años enfermo dicho lugar.
ROCKFACTORY.BLOG 2012 / EDITORIAL