miércoles, 14 de marzo de 2012

TEXTOPATA

Una Salida con una Chica Alternativa (Parte 4)

Fue casi alucinante aquella primera vez sexual que por experiencia tuvo y nos conto la tal Venus mientras compartíamos el vino en aquel sitio bajo la tenue oscuridad de la noche ese hombre y mujer a la vez se estaba abriendo de alma y nos relato mas sobre su estilo de vida. Si bien pareció pornográfica amateur, también tuvo sus momentos dramáticos.  Tratándose que nosotros midiéramos nuestro nivel de alcohol en nuestros cuerpos en una escala del uno al diez se podía decir que a esa hora siendo casi las cinco de la mañana ya estábamos en la mitad de la escala o sea a cinco niveles menos de perder el conocimiento por el licor. Los chicos se estaban dejando llevar por sus instintos y según ellos y por todos aquellos que se sobrepasan en sus acciones la culpa era del vino. Entonces dejaron de lado la faceta real de Venus y la miraban como si se tratara solo de una fémina lista y deseosa de que suceda algún evento sexual instantáneo producto de los instintos de todos menos yo claro quien desde un principio me dije que me cuidaría siendo precavido al beber  y al expresarme. Las caricias de Javicho fueron enunciadas en el cuerpo de Venus según ellos se trataba de un juego aventado como agarraditas de cintura y besitos en el cuello. Acompañado de carcajadas coquetas mutuas. Daigo también quería su parte de aquel raro postrecillo que Javicho iba probando de a poquitos. Pero justo en ese momento se acabo el vino por lo tanto aquel gusto no iba a pasar si no había algún liquido que lo empujar al estomago. A parte que la luz del día se hacia notar suave pero ya no le dejaba pie a la oscuridad de la noche.  Salimos de aquel descampado para ir a comprar mas vino y la previa conversa todos habíamos acordado ir si o si a la playa pero con Venus por lo tanto pasamos por casa de Javicho para sacar una sombrilla y algo o poco de dinero. Cuando estuvimos en casa del susodicho este abandono el asiento trasero dándole pase libre a Daigo para que probada de Venus y que ansioso estaba Daigo de aquella mujer incompleta.  Yo me inmute de mi lugar ni siquiera lo deje para ir al baño pues no me quería perder de aquel acto sexual que dentro del auto se iba a consumar. Así que Daigo empezó a acariciar de manera apasionada a la tal Venus abría bien los dedos y estiraba lo mas que podía los brazos para tocar las piernas y el derrier  que para aquellos que no lo saben es culo en francés o italiano seguro al ciento por ciento no lo estoy pero de que se oye mejor y menos fuerte pues si. Antes de proponerse Daigo a penetrarla o penetrarlo como ritual de apareamiento antinatural, este le beso en la boca e introdujo su lengua y la junto con la de Venus. Ambos cerraban sus ojos mientras compartían e intercambiaban el aliento. No les importaba nadie quien pasara por la calle, ellos se entregaban a su placentera necesidad y yo no solo estaba en shock por dos razones la primera porque estaba viendo que realmente el maquillaje, la ropa ceñida, la cabellera larga y una actitud coquetamente femenina era  capaz de hacerle perder el control no a un solo hombre sino que en este caso a los dos. Y la segunda razón era de que no tenia una cámara fotográfica que bien nos venia en momentos como estos.  Cuando Daigo estaba buscando el preservativo puesto erróneamente el bolsillo trasero de su pantalón Javicho hizo su aparición y toco la ventanilla de la flamante parejilla casi sexual. Que inoportuno para estos dos pero todo lo contrario para mí pues creo que no hubiera sido lo suficientemente tolerante para ver aquello bueno uno que otro ratito por las ventanas más no todo. Daigo volvió al asiento del conductor. Seguidamente fuimos por dos litros más de vino y siendo las seis de la mañana nos adentramos hacia los cerros de la ciudad donde sacan arena para las construcciones allí donde no habita nadie. A casi veinte minutos de donde estábamos pues teníamos que hacer un poco de tiempo para luego ir a buscar a nuestro amigo Yimi a eso de las ocho de la mañana. Pero creo que nunca debimos de hacer tiempo para nada porque lo que paso luego si fue una escena digna de porno para no contar.

ROCKFACTORY.BLOG 2012 / EDITORIAL